¿Cuánto vale un minuto de nuestro tiempo? Seguro que más de una vez te has parado a pensar sobre esto, al menos, todos los que nos dedicamos al mundo de los servicios profesionales (consultores, auditores, albañiles, fontaneros…) lo hemos hecho. ¿A cuánto tengo que cobrar la hora para ser “rentable” en mi negocio?
La verdad que este es un tema que daría para un largo debate, pero no quiero pensar en eso ahora, vamos a intentar realizar un análisis desde otro prisma. Pensemos en cuánto aportas o “desperdicias” cada minuto de tu tiempo en los demás… ¿Merece la pena para las personas que están a nuestro lado cada uno de los ratos que comparten con nosotros?
Seguramente sí, por algo están a nuestro lado, pero escalemos este análisis a otras dimensiones en cuanto al volumen se refiere, me explico… Esta reflexión surge al pensar cuánto tiempo puede ganar o perder un país por un buen o mal aprovechamiento del tiempo. Y pongo un ejemplo que seguro ilustra con más precisión esta reflexión.
Pongamos el caso de que “Los Chunguitos” (prometo que no tengo nada contra estos señores, pero parece ser que están de moda en estos días), dan una charla de esas que acostumbran en la tele, cargadas de profundidad y reflexiones sesudas, y tienen una audiencia de un millón de personas (poco para lo que suele ser habitual en este tipo de programas). Ya vamos viendo por dónde voy, ¿no? Este país acaba de invertir un millón de minutos en algo que dudo que aporte mucho a nuestra sociedad. Si es caso unas risas, que de vez en cuando, no está mal. Pero ¿y si esta charla dura 10 minutos? ¿De verdad se han podido tirar 10 millones de minutos de nuestras vidas por el desagüe?
No continúo por aquí, haciendo más demagogia con los pobres Chunguitos, simplemente tomemos este ejemplo como ilustración de lo que hoy en día es una realidad. Pensemos por tanto en lo que supone cada uno de nuestros minutos en nuestras empresas, cómo influye que vayamos a una reunión sin preparar, que lleguemos tarde o que simplemente hagamos perder el tiempo a nuestros compañeros. Tenemos que dar especial importancia a todo lo que tiene influencia en el resto de personas, porque ya no se trata de que uno mismo pierda el tiempo, se trata del efecto multiplicador que esto tiene cuando nuestras actuaciones influyen sobre un número importante de personas. Es lo que he denominado el “Efecto Multiplicador de los Minutos”.
Pero démosle la vuelta y pensémoslo en positivo. Todos los minutos “interesantes” que comparten personas con grandes ideas consiguen el mismo efecto multiplicador, así que imaginemos los resultados que podemos conseguir cuando estas personas tienen audiencias de más de un millón de personas. Un millón de minutos de valor para nuestro país!!! Esto nos ofrece unas oportunidades exponenciales…
Por tanto, y después de lo dicho, espero que el minuto que acabas de dedicar a la lectura de este artículo haya aportado al menos el valor que esperabas y, por qué no decirlo, un poco más de lo que hubieses aprendido escuchando a Los Chunguitos.
Responder