El pasado lunes, 17 de septiembre, la revista New York Times Style Magazine publicó un artículo sobre las nuevas oficinas de Oniria Consulting, nombrándonos “La oficina de la semana“:
Como arquitecto, la obra de Alvar Aalto ha sido minuciosamente analizada, comentada y explicada al tratarse de una de las figuras claves del modernismo nórdico. Pero como diseñador, la morfología de una de sus piezas más conocidas, el jarrón Savoy, aún hoy sigue siendo una incógnita. Creado en 1936 para la Exposición Internacional de París, hay quien dice que sus onduladas curvas se inspiran en las orillas de los numerosos lagos de Finlandia, mientras que para otros son una simulación de la forma del agua en movimiento, como si el continente mimetizara el contenido. El nombre que Aalto utilizó en sus bocetos, Eskimåkvinnans skinnbyxa, le da otra interpretación más sorprendente, pues traducido del finlandés quiere decir algo así como “pantalones de cuero de mujeres esquimales”. Sea cual fuese la intención original de Aalto, lo cierto es que más de ocho décadas después aquellas formas orgánicas siguen sirviendo de inspiración para diseñadores y arquitectos. Uno de los ejemplos más recientes lo podemos encontrar en las nuevas oficinas de Oniria Consulting, una consultora dedicada a la selección de personal ubicada en Pamplona, Navarra.
“Las formas curvas y orgánicas de todo el local aportan un cierto dinamismo, acorde con el espíritu de la marca; pero siempre sin caer en estridencias o excesos”, explica Víctor Larripa, arquitecto de MLMR, el estudio encargado del diseño de esta sede, y quién además de a Aalto también menciona como referencia la obra plástica del dadaísta Jean Arp.
La configuración curva no es un capricho. Por un lado, se encontraban las necesidades propias de la compañía, que tras cuatro años de actividad buscaban un espacio al que considerar suyo: “Nos planteábamos un sitio que respondiera a tres pilares que consideramos básicos para nuestro negocio, como son la cercanía con el cliente, una imagen moderna y un entorno que favoreciera la colaboración y el trabajo en equipo”, cuenta Josean Ascarza, socio y director de Oniria Consulting. Por otro lado, estaba la singularidad del edificio, una construcción clásica del segundo ensanche pamplonés con una geometría perimetral muy compleja, con pilares y vigas de hormigón en diversos puntos. Por lo tanto, para establecer espacios diferenciados e independientes la estrategia de MLMR consistió en crear geometrías y cuerpos individuales que en su interior condensan las dependencias más privadas y en las zonas intermedias los espacios públicos, “formas que, por otro lado, encajaban muy bien con la identidad joven y dinámica de la empresa”, asegura Larripa. De este modo, en los 300 metros cuadrados que ocupa este espacio de trabajo hay lugar para una gran sala de reuniones, despachos, salas de entrevistas y una zona de trabajo abierto para los diez empleados de Oniria y las constantes visitas.
La continuidad entre áreas viene dada por la elección de materiales: “Los naturales como la madera o el mortero de arcilla de ciertas paredes son un contrapunto interesante a las formas curvas, generando todo ello un aspecto bastante natural y –valga la redundancia–, en cierto modo onírico”, explica Larripa. También el mobiliario, escogido por el mismo estudio, potencia la suavidad de las formas estructurales: las sinuosas líneas de las sillas Belleville de los hermanos Bouroullec, la sencillez de la silla All Plastic Chair de Jasper Morrison, la curvatura de la mesa Gueridon de Jean Prouvé o la estética todavía moderna de las sillas DAX y DAR de Charles y Ray Eames. Todas las piezas, además, en una paleta de colores compuesta por verdes, cremas, grises y azules suaves que “se eligieron tratando de aportar, al mismo tiempo, un aspecto singular y contemporáneo pero también elegante y sereno”, cuenta Larripa.
Trabajar en este espacio tan singular parece satisfactorio. “La experiencia está siendo excelente”, cuenta Ascarza. “Hemos conseguido crear un entorno con mucha luz natural que ha conseguido facilitar la colaboración entre los profesionales que componen Oniria Consulting”. Buscaban un sitio propio que fuera único, y los sueños, a veces, se cumplen.
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