Patricia Escribano Gil (Pamplona, 36) es una de las navarras por el mundo que ha logrado retornar gracias a Oniria Consulting. Patricia ha estado 6 años residiendo en París y trabajando de jefa de recepción en el Hôtel Mercure Paris Tour Eiffel Pont Mirabeau. También ha trabajado de consultora informática en el Grupo Accor, dedicado a la hostelería y en Altran, empresa de consultoría, para la empresa Bouygues Telecom. Fue en marzo cuando aterrizó en GM Global Solutions (Torres de Elorz, Navarra) como técnica de servicios.
Ahora, tras un periodo de asesoramiento y adaptación, le hemos pedido a Patricia que nos responda a algunas preguntas a acerca de nuestro programa y que cuente cómo está siendo su nueva “vida” laboral.
1-¿Por qué decidiste hacer las maletas y marcharte a trabajar al país vecino?
Siempre había tenido ganas de tener una experiencia laboral en el extranjero y, especialmente, en París. A finales de 2012, estando trabajando como consultora informática en Gamesa, me quedé en el paro debido a los recortes que tuvieron lugar en la empresa. Entonces, me dije que quizás era el momento de iniciar una nueva aventura profesional en el país vecino y me animé a postular en algunos hoteles de París como recepcionista, pues los idiomas eran mi puerta de entrada.
2-¿Por qué decidiste volver a Navarra? ¿Es por una cuestión más bien emocional o laboral?
Digamos que llevaba ya unos años en París y desde hacía un tiempo tenía en mente la idea de volver a Pamplona, donde tengo a mi familia y amigos. Siempre he tenido claro que en París iba a estar tan solo durante un tiempo y que iba a ser una etapa en la que iba a coger experiencia profesional, pero que tarde o temprano volvería a Pamplona para quedarme.
3-Una vez tomas la decisión de volverte, ¿con qué dificultades te encontraste a la hora de buscar trabajo en Navarra?
Lo que más noté, y es lógico, es que la oferta profesional que hay en Navarra no es la misma que hay en París, sino mucho menor. Por otra parte, al estar alejada de aquí, se pierde un poco el vínculo con lo que se mueve por Pamplona, donde a veces el boca a boca también funciona muy bien.
4-¿En qué momento aparece Oniria Consulting y cómo conociste el proyecto “Navarros por el Mundo”?
Hace casi dos años, una amiga de Pamplona que vive en Madrid me habló del proyecto “Navarros por el Mundo” e inicié el proceso para inscribirme en el programa. Después, mi familia también me habló de él al enterarse por la prensa.
5-¿Qué te ha aportado Oniria Consulting y cómo ha sido el proceso en el que has participado?
Hace año y medio, me inscribí en el programa pero, por dificultades con los horarios de trabajo, dejé un poco aparcada la parte relativa a la entrevista. Siempre tuve en mente retomarlo en algún momento y fue a finales del año pasado cuando decidí plantearme más seriamente mi vuelta. Entonces, recontacté a Oniria y retomamos la entrevista que no había realizado el año anterior. Me dieron muchos consejos en cuanto a la búsqueda de empleo y rápidamente me pusieron en contacto con la empresa en la que estoy trabajando actualmente, que buscaba un perfil similar al mío. Desde entonces y durante todo el proceso de selección hicieron un seguimiento del mismo.
6-Por último, ¿aconsejarías a personas que están en el extranjero u otras comunidades a buscar ayuda en un proyecto como “Navarros por el Mundo”? ¿Por qué?
Sí que lo aconsejaría, no ya sólo por los consejos que me pudieron dar a la hora de buscar trabajo y el ponerme en contacto con mi empresa actual, sino también por el hecho de sentirme integrada en un programa en el que se intenta ayudar a los navarros que estamos fuera de Navarra. Esto fue un paso importante para mí a la hora de plantearme la idea de volver a casa como algo real y no sólo como un “sueño” que no se terminaba de concretar.
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